1. Piensa en un nombre cercano al producto o servicio.
El nombre debe dar una idea clara del tipo de producto que se comercializa.
2. Simple y corto
Si está conformado por pocas sílabas y por una palabra, el nombre puede ser más fácil de recordar.
3. Un apellido siempre es una buena opción
Nombrar a tu marca como un apellido es una buena alternativa ya que permite darle renombre y ubicar su origen con mayor facilidad.
4. No uses iniciales
En el mercado ya existen muchas marcas que integran iniciales y se pueden llegar a confundir o dar a entender otra cosa de lo deseado.
Recuerda que en México existe el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial -IMPI- para registrar un nombre, averigua cómo hacerlo y asegúrate que no exista otro igual dentro del mismo rubro que deseas registrar antes de acudir con ellos.
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Fuente: https://cutt.ly/uonfY0o